Poeta en Nueva York
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Poeta en Nueva York

Federico viaja a Nueva York tras las críticas a su Romancero gitano por parte de sus compañeros de la Residencia de Estudiantes en Madrid: Buñuel y Dalí. Necesitaba distanciarse de las burlas a su obra, de ese sentimiento de ser “el perro andaluz” que acababan de filmar. Del abandono por parte de la persona con la que vivía una historia de amor. Del malestar social en un España que se debatía entre dictadura y rey a la fuga…

No le atraía esa ciudad pero Fernando de los Ríos que había conocido a Federico como alumno en la Facultad de Derecho de Granada en 1914, en la primavera de 1929 acuerda con el padre de Federico que el joven poeta le acompañe a la Universidad de Columbia donde tendría la oportunidad de aprender inglés y cambiar de aires. Embarcaron juntos en el Olympic a principios de junio del 29 y arribaron el 26 de junio a la Gran Manzana. La hija de Fernando, Laura se casaría con el hermano pequeño de Federico, con Francisco. En su etapa como catedrático en la Universidad de Granada ejerció una profunda influencia cultural llegando a ser director del Centro Artístico en una de sus etapas más brillantes. Como ministro de la República impulsó la creación de la compañía teatral La Barraca. Fue por todo ello una persona muy influyente en el universo Lorca.

 

todo rumor será piedra, toda huella latido

el corazón salió solo

la aurora de Nueva York gime

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